viernes, 21 de mayo de 2010

“Llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos”... <>.

II. LA ELECCIÓN DE SU GRUPO DE ENTRENAMIENTO.

UNOS CUANTOS HOMBRES.

Jesús era muy astuto, utilizó un método que nadie hubiese pensado. Los hombres fueron su método.

En los evangelios sinópticos se nos hace mención de la elección de los doce discípulos de Jesús.

En Mateo se nos dice:

“Entonces llamando a sus doce discípulos...” <>.

En Marcos:

“Después subió al monte, y llamó así a los que él quiso; y vinieron a él. Y estableció a doce,... <>.

Lucas habla así:

“En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios.

Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales llamó también apóstoles”. <>.

Nótese que los Evangelios nos hacen ver que Jesús tenía muchos discípulos de los cuales eligió a unos cuantos.

Pero fijémonos que en uno de los Evangelios sinópticos, nos muestra la diligencia que tuvo el Maestro al elegir a su grupo de entrenamiento. Él no podía tomar ningún riesgo y escoger a la ligera a su equipo de trabajo. Antes que todo, tenía que pedir la dirección de su Padre, para poder elegir a los que le iban a funcionar con eficacia.

Hombres que dieran testimonio con sus vidas, y continuaran con la obra que Él mismo había comenzado, puesto que retornaría al Padre después de concluir su misión.

Aunque al principio estos hombres no mostraban crecimiento; ellos serían los que liderearan en el futuro la Iglesia, que aparte de estar firme en la tierra; pasaría a tener significado en la eternidad.



LAS CUATRO LISTAS DE LOS APÓSTOLES.

Ahora observaremos un poco las listas de los apóstoles de Jesús que aparecen en los Evangelios sinópticos y en el libro de los Hechos:

Mr. 3.16 Mt. 10.2 Lc. 6.14 Hch. 1.13
1.- Simón Pedro Simón Pedro Simón Pedro Pedro
2.- Jacobo Andrés Andrés Jacobo
3.- Juan Jacobo Jacobo Juan
4.- Andrés Juan Juan Andrés
5.- Felipe Felipe Felipe Felipe
6.- Bartolomé Bartolomé Bartolomé Tomás
7.- Mateo Tomás Mateo Bartolomé
8.- Tomas Mateo Tomas Mateo
9.- Jacobo hijo de Alfeo Jacobo hijo de Alfeo Jacobo hijo de Alfeo Jacobo hijo de Alfeo
10- Tadeo Tadeo Simón el Zelote Simón el Zelote
11.- Simón el Cananeo Simón el Cananeo Judas el hno. de Jacobo. Judas el hno. de Jacobo.
12.- Judas Iscariote Judas Iscariote Judas Iscariote

En estas listas observamos la primacía de Simón, Pedro, ante los demás apóstoles. Esto no significa que Pedro era considerado como líder después de la muerte de Jesucristo. No pensemos ni por un momento eso, ya que el Señor Jesús fue el líder de ellos aún después de su muerte; puesto que eran guiados por el Espíritu Santo y no por ellos mismos.

Es también de notar que en las cuatro listas aparecen en el mismo orden cronológico Simón, Pedro, Felipe y Jacobo hijo de Alfeo. Podríamos dividir en tres grupos estas listas y mencionar que en cada grupo se nos muestra el carácter de los discípulos del Maestro, por ejemplo: 1). En el primer grupo comandado o encabezado en las listas por Pedro, observamos un carácter de personas introvertidas, rebeldes, etc.; 2). En el segundo grupo encontramos personas intelectuales, de ciencia, filósofos; 3). Y en el tercer grupo: personas revolucionarias, con carácter de lucha y de poder.

HOMBRES CON UN CORAZON DISPUESTO.

Los discípulos de Jesús a simple vista no parecían ser personas adecuadas para dar el ancho por así decirlo, para ser capacitados.

Estos hombres eran comunes y corrientes sin mucha educación profesional, algunos de ellos eran pescadores como Pedro, otros recaudadores de impuestos y para este trabajo no se necesitaba estudio. Ninguno de ellos tenía riquezas, solo el que podríamos decir que más o menos tenía una posición económica y educación académica era Judas Iscariote; pero de ahí en fuera todos eran hombres sin mucha educación. Pero eso sí, eran hombres con un corazón dispuesto de aprender del Maestro, a pesar de su carácter.

Podríamos pensar de ellos que no se podría lograr ganar ni siquiera un alma para el Señor, pero el Maestro miró el potencial y la capacidad que ellos tenían para atender a lo que se les enseñaría. El Maestro no pedía más de ellos, solo que estuvieran dispuestos a aprender de Él, y ellos aceptaron, sin dudar ni un momento y siguieron al Maestro.

SU VIDA LA DEDICO A UN GRUPO PEQUEÑO.

El Maestro pretendía dedicarse solo a un grupo pequeño de personas, no tenía la intención de descuidar las multitudes, pero era mejor que en primer lugar se dedicaran a un grupo pequeño ya que se le puede dar mayor atención y cuidado que a un gran número de personas.

No podría transformar al mundo, si primero no transformaba y moldeaba la vida de unos cuantos a través de su vida.

Aquí es donde toma mayor fuerza su método, pues si primero transformaba y moldeaba la vida de estos pocos hombres; ellos haría lo mismo con otros y así sucesivamente. Alcanzando así una evangelización mundial eficaz y sencilla.

Es por eso que hay que entender que Jesús era realista. Él sabía que no podía ganar almas a través de las multitudes.

Necesitaba dedicarse a unos cuantos para que después fuesen líderes a los que las multitudes siguieran.

Ahora bien, ya conocemos y entendemos el motivo de la elección de su grupo de entrenamiento, y cuál era su propósito. Ahora es el tiempo de actuar de Jesús para comenzar a identificarse y relacionarse con sus discípulos.

martes, 30 de junio de 2009

Más no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mi por la palabra de ellos. “Jn. 17:20”.

I.- LA VISION DEL MAESTRO.

TOMAR UN PUEBLO PARA SI.

Jesucristo en sus días aquí en la tierra eran más que darnos la revelación de su Padre, aunque siempre estuvo conciente de esto, El tenía la intención de edificar su Iglesia, salvando de este mundo un pueblo para sí, a fin de que este pueblo fuese realmente un pueblo que le adorara “en espíritu y en verdad” <>.

El Maestro tenía una gran visión sobre el pueblo que él tomaría para sí, puesto que Él miraba un pueblo de Espíritu, no un pueblo de carne, ya que el pueblo que estaría con Él, tendría que ser un pueblo que no pereciera y estuviese con Él en su morada celestial. <>.

En este versículo de Jn. 17:20 podemos contemplar cuan grande y extensa era su visión, no era solamente entrenar a sus doce discípulos para que estuviesen con Él, sino, que a través de ellos más personas creyesen en Él y se uniesen a su Iglesia Espiritual.

La Salvación del mundo no estaba excluida de la misión del Maestro, pues Él lo tenía presente en su mente, sin embargo buscaba y anhelaba un pueblo salvo, capaz de ser maduro y poder reproducirse espiritualmente.

TRAZÓ SU ESTRATEGIA CON AUDACIA.

Los Evangelios nos muestran la vida del Maestro. Cada uno de ellos nos da un punto de vista y enfoque diferente en cuanto a la manera de vivir del Maestro, pero notemos, que ningún Evangelio nos muestra que el Maestro apartaba su mirada del propósito de su encarnación. El nunca perdió de vista la redención del hombre de sus pecados ante Dios.

Su vida fue ordenada y todo lo que hizo y dijo iba siempre dirigido hacia su objetivo. Nunca lo perdió de vista.

Él tenía una estrategia para alcanzar al mundo; la cual lo llevaría a lograrlo.

Su vida no fue algo malgastado o puesto al azar, tenía propósito, no podría permitirse ni un solo error, puesto que si lo hacía fracasaría en su meta.

La manera en que enseñaba a vivir era muy especial, puesto que a través de su vida entrenó a sus discípulos para hacerles notorio que Dios quiere que el hombre viva rectamente ante Él.
SU ESTRATEGIA FUE SU VIDA.

Él dijo que: “Él es el camino” <>. Aunque es notorio darnos cuenta que a simple vista no se puede percibir su estrategia, pues su vida era inadvertida y silenciosa, ya que nunca quiso llamar la atención, pero cuando logramos captar la estrategia del Maestro, nos daremos cuenta que a través de su vida está la formula para obtener una evangelización eficaz y tan sencilla que ninguno de los métodos de actualidad, lograría alcanzar plenamente el objetivo que el Maestro alcanzó con sus discípulos. La evangelización mundial.

Él no se centró en las multitudes, sino en sus discípulos, esto era parte de su visión, para que todo el mundo fuese salvo. Algo que no se lograría en el presente, pues ese no era su plan; sino en el futuro cuando Él viniese con gran poder y con gran gloria a tomar a los suyos.

Es por eso que es necesario tomar su ejemplo de vida para enseñar a otros a vivir. Él a través de su vida nos enseñó cómo viviría Dios entre nosotros, sin ningún error, aún con las limitaciones que al igual que nosotros tenía.

Él tuvo presente lo que era correcto y nos lo mostró; es más, Él no solo mandó diciéndole a sus discípulos lo que tenían que hacer, sino Él mismo lo hizo enseñándole a ellos y a nosotros cómo se debe vivir en esta vida. Jesucristo es el ejemplo perfecto, ya que al seguir su vida, notamos su gran audacia para evangelizar con sencillez y eficacia, así que, sigamos sus pisadas.

Tengamos siempre una visión del objetivo que queremos alcanzar al evangelizar; pero que siempre esa visión vaya enfocada a lo que Jesús nos mostró en su vida.

miércoles, 4 de marzo de 2009

INTRODUCCION.

A lo largo de los años, la Iglesia de Cristo se ha preocupado por la evangelización mundial, ya que le es preocupante la gran cantidad de personas que pasan a la eternidad sin Cristo, y es por eso que la Iglesia de Cristo se ha dedicado a la tarea de la evangelización mundial a través de diversas formas y métodos evangelisticos para proclamar el mensaje de salvación y traer almas a Cristo. Podemos decir que es una buena forma de ganar almas, pero muchas de las veces, por no decir todas, no se alcanza el objetivo que trazó el Gran Maestro, el Señor Jesucristo. De revelar al Padre y sus propósitos para el hombre, a través del discipulado de los nuevos integrantes de la familia de Dios para que estos tengan un crecimiento espiritual, de tal forma que puedan enseñar a otros, y estos a otros y así sucesivamente.

Es preciso aclarar que no estoy quitando crédito a lo que el Espíritu Santo ha hecho a través de los evangelistas, Billy Graham, Moody, Sunday, etc. que han ganado muchas almas para Cristo. Pero es necesario darnos cuenta que el método que utilizó el Gran Maestro, es sencillo, eficaz y tan real que logra un objetivo completo de madurez espiritual en la vida del discípulo que este se logra reproducir espiritualmente, haciendo nuevos discípulos y que estos a su vez harán lo mismo.

Cabe señalar que aparte de la Biblia como el mejor apoyo; en este ensayo me he apoyado en un libro que ha acaparado por completo el Plan y Objetivo del Maestro. A fin de darles a conocer con más certeza el discipulado Cristocentrico. Este libro lleva por nombre “El plan maestro de la evangelización” de Robert Coleman.

Espero con todo mi corazón que lo que se lea a continuación sea de edificación para usted y le ayude a comprender que la manera más eficaz y sencilla de evangelizar es la que el Maestro trazó a lo largo de su vida en esta tierra.